El día que las madres descubrieron los grupos de Whatsapp
Por Marga Cabrera ( @@MargaTwita )Existe un grupo de Whatsapp por cada clase, siempre hay una madre-empollona que se ofrece a crear el grupo al inicio de curso, o a actualizar las altas y bajas. Si tienes tres hijos, pues tienes tres grupos. Si tus hijos van a actividades extraescolares, súmale grupo por cada actividad e hijo: inglés, música, natación… con lo que podemos tener de media unos dos grupos por hijo.
Mucho cuidado con meter la pata, porque no te lo perdonarán, hay que saber en todo momento en qué grupo estás y con quién hablas… y podríamos pensar que es mejor callar, pero la que calla también es criticada, es la que pasa a ser la mamá-mirona, lo lee todo y no participa, «ya ves tú, para eso mejor que no esté». Y si participas, también entras a formar parte de la gran familia, no importa lo que hagas, hay una reina para todo:
La mamá-metepatas, no se entera de nada y pregunta las cosas que ya se han resuelto 50 mensajes más arriba. Si leyera… –ups, perdón, es que hoy he tenido 2 reuniones de trabajo y no he estado pendiente¬.–
La mamá-faltas, esa mamá que cada cosa que escribe es una patada al diccionario, y sin complejos, hay ba ella orguyosa de su forma de escrivir sin ser consciente en ningún momento de su reputación.
La mamá-vaga, que por no preguntar a su hijo lo pregunta TODO en el grupo.
La mamá-sobrada, cuyo retoño hace siempre todo bien y aconseja a las demás para que puedan tener un hijo tan fantástico como el suyo.
La mamá-espía, la que pregunta si alguien sabe si su hijo se come el bocadillo en el recreo o si le ha dejado la novia.
La mamá-cotilla, aquella que comenta quién está enamorado de quién, o cuelga la foto del profesor disfrazado de hace 15 años, aquella que encontró al buscar el nombre en Google porque estaba aburrida, mientras conocía y compartía la vida y milagros del docente.
El papá-molón, siempre hay alguno, un hombre en la pandilla que participa y quiere ser el más gracioso.
La abuela-paratodo, esa pobre a la que le toca la intendencia de los nietos y se actualiza para no quedarse atrás e incluso intenta ser una más en el grupo. Aunque nunca dejará de ser la «abuela de», y además criticarán a la madre por no ser ella la que gestiona la responsabilidad de la comunicación extraescolar.
La mamá-borrego, no suele opinar ni preguntar, está ahí para que nadie la critique, a veces participa con un «ja ja», nadie sabe realmente qué opina ni si piensa.
La mamá-emoji, esa que ha descubierto los emoticonos y los utiliza compulsivamente!!!!!!!
La mamá-dobleidentidad, nunca habla en la vida real y en el grupo es la más animada de la fiesta.
¿Se te ocurren más? Podría no parar, y es que los grupos de madres dan mucho juego. Incluso podríamos ponerle instrucciones de uso:
«Bienvenido al grupo de 2º C 2014/15, se aconseja quitar las alarmas de mensajes para no ser distraído cada 5 minutos, leer al menos 3 veces al día para no perder comba. Si no desea ser altamente criticada debe participar, aunque sea con un “jaja” cada 8 horas. Si no quiere que cuestionen su nivel cultural utilice el corrector ortográfico y siempre podrá echarle las culpas. En caso de problemas utilice una carita sonriente o la flamenca.
Y recuerde, si abandona el grupo: lo sabremos…».
@Mamaimperfecta