Buenas!!
Esta semana se celebra la semana de la lactancia materna, la manera más natural de alimentar a nuestro pequeño/a aunque no la más fácil en sus principios.
A todas nos da ternura ver como una madre alimenta a su "cachorro"..y si no sólo a los humanos sino a cualquier animal, esto también nos une. El sentimiento de protección de la madre y el de sobrevivencia del pequeño/a es universal, y por eso ese reconocimiento.
Mis principios fueron muy duros en la lactancia, mi hijo nació a las 20
La familia que nos esperaba en la puerta de quirófano no se esperaba ver aquella imagen y aún la emoción fue mayor. Ahora lo recuerdo y me emociona.
Bueno no fue fácil...a las 23
Mis hormonas, mi orgullo, y mi instinto de protección maternal no se hicieron esperar y de pronto me prometí que yo daria a mi pequeño el pecho si o si...porque para mi la leche materna entiendo es lo más natural y mejor que le podía dar a mi hijo...
Sobretodo quiero dejar claro que las madres que decidan dar biberones de leche artificial tienen todo mi respeto igualmente, cada uno decide sobre la alimentación y educación de los suyos y nadie puede criticar esto.
Bien, os cuento durante las próximas 48 horas mi obsesión era que mi hijo se alimentara del pecho por mucho que me doliera.
Después de mucho intentarlo y con algún que otro susto y alguna obra mal hecha (intenté sacarme leche con una máquina durante 40' cuándo aún no tenia la subida de leche...), ya que por ictericia mi hijo quedó ingresado tres días mientras yo tenia el alta, me sacaba leche para llevarle al box.
Bien el fin de la historia fue feliz...mi hijo mamó hasta los 21 meses y lo dejamos porque me tenia que medicar con antibiótico y no podía seguir.
Como por experiencia sé que los principios no son fáciles y menos para una madre primeriza quiero compartir con vosotras estos consejos extraídos de guiadelnino.com
Para que desde el primer día, tu pecho produzca leche suficiente para alimentar a tu bebé, tan sólo tienes que seguir estos 10 consejos.
1. Comienza la lactancia durante la primera hora tras el parto. Es importantísimo porque en ese primer momento tras el nacimiento, tu bebé estará en un estado de alerta tranquila que facilita el contacto inicial con la lactancia. Pasado este tiempo, tu hijo entrará en un sueño profundo por intervalo de unas 6-12 horas, en el que te resultará difícil conseguir que se agarre al pecho.
2. Amamanta día y noche. Es la mejor receta para que tu pecho produzca leche suficiente. Así, durante las primeras semanas, tu hijo debería hacer unas 8-10 tomas cada 24 horas.
3. Asegúrate de que tu bebé succiona eficazmente. Una succión incorrecta se relaciona no sólo con una inadecuada producción láctea, sino además con otros problemas como la aparición de grietas o la retención de leche en la mama. Y para lograr que tu pequeño succione bien, tiene que estar bien colocado. Éstas son las claves: tripa contra tripa –es decir, su cuello no debe estar girado–; su boca a la altura de tu pezón –colócale sobre un cojín de lactancia para conseguirlo–, y buen acoplamiento boca-pecho –debe tomar el pezón y parte de la areola, su labio inferior estar vuelto hacia fuera, y no debes escuchar chasquidos durante la toma.
4. Acaba el primer pecho antes de colocarle en el segundo. Sólo así te asegurarás de que lo ha vaciado bien. Es importante para asegurar la buena producción láctea, y también para que tu pequeño tome la parte más nutritiva de la toma. Al principio, tu pecho le ofrece la leche más aguada para calmar la sed, y al final, la más rica en grasas y vitaminas.
5. Ofrécele el pecho a demanda. Olvídate del reloj y observa a tu hijo. Cada niño sigue su propio ritmo y algunos tienen apetito cada 2 horas, y otros harán tomas sin intervalos fijos. Además, ten en cuenta que hay bebés que vacían el pecho en 5-10 minutos, y otros que necesitan mucho más tiempo.
6. No le ofrezcas biberones de leche artificial o suero glucosado. Si la lactancia se establece correctamente, tu pecho producirá leche suficiente para alimentar a tu bebé. No necesita “ayuditas”. Con ellas, sólo conseguirás que tu pecho interprete que cada vez debe producir menos leche.
7. Evita el chupete. Especialmente los primeros 10 días, hasta que la lactancia esté bien establecida. Así, le evitarás la confusión con el pezón. Y es que la succión de pecho y la del chupete es diferente, y es posible que si le ofreces el chupete de forma precoz, al agarrarse al pecho intente hacerlo como lo hace a éste, con lo que la succión no sería efectiva.
8. No olvides que el pecho es más que alimento. La succión les tranquiliza y, por tanto, tu bebé no siempre pide el pecho porque tenga hambre. Tal vez, sólo necesite unos minutos de contacto piel con piel. No se los niegues.
9. Descansa y sigue una alimentación correcta.Sigue una dieta equilibrada, de unas 2.500 kcal, y duerme todo lo que te permita tu bebé. Como, sobre todo, en las primeras semanas pasarás parte de las noches en vela, procura dormir a ratitos durante el día, coincidiendo con las siestas que haga tu bebé.
10. Busca ayuda. Tu familia, tu pediatra y los grupos de apoyo a la lactancia son los pilares en los que debes apoyarte ante cualquier duda o dificultad con la lactancia.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada